26 de febrero de 1784

Ayer se produjo el momento más vergonzoso de mi vida.
Superando con mucho al día en que me defequé en la taberna presumiendo de hacer sentadillas delante de la linda hija de los McEllroy.

1 comentario:

  1. Jajajajajajaja.. mmmppff.... jajajajaja. De verdad, que estoy llorando de la risa...

    ResponderEliminar